LA PARÁLISIS DE TESTIGOS OVNI EN ARGENTINA EN RELACIÓN A LA DISTANCIA

Por CARLOS FERGUSON

“La gente de la Edad Media estaba tan convencida de la existencia de las hadas y de sus palacios subterráneos como tú puedes estarlo de la existencia de una civilización extraterrestre con brillantes ciudades de cristal en algún planeta lejano. Dentro de unos cien años, el fenómeno tal vez esté jugando otros juegos nuevos con nosotros. Quizás toda la parafernalia interplanetaria sea olvidada. Pero esas luces – y esa maldita procesión de criaturas anómalas y humanoides de tres metros de altura – seguirán marchando entre nosotros. Individuos aislados seguirán siendo alcanzados súbitamente por rayos de energía provenientes del cielo en alguna ruta solitaria, para luego abandonar a su familia, dejar sus trabajos, y lanzarse a la fama o hundirse en la locura y la bancarrota…” (Jhon Kell – “Las profecías del hombre polilla”)

“De la gran variedad de observaciones y manifestaciones que conforman el fenómeno Ovni, creo que aquellos casos donde se han documentado las secuelas médicas son los que pueden proporcionarnos más avances, mucho más que las espectaculares abducciones, que adolecen de cierto sesgo sensacionalista”. (Dr.Jacques Vallée)

Este artículo está dedicado al colega y amigo Carlos Pérez Lavagnini (Uruguay), recientemente desaparecido. Siempre priorizó el criterio y objetividad en la investigación y fue un ejemplo para muchos. Otro gran hombre que ha escrito páginas de la Ufología, que mañana serán reconocidas.

PRÓLOGO

En consonancia con los efectos electromagnéticos que el fenómeno genera, hacía falta concretar un resultado estadístico argentino sobre estas manifestaciones.

Hablamos de efectos visuales, auditivos y físicos. La gama es muy amplia: inconciencia, enceguecimiento, dolores y malestar general, quemaduras, punciones, sensaciones de calor, descargas eléctricas, olores, amnesias, teleportaciones, y parálisis.

A nivel mundial fue el científico norteamericano John Schuessler quien ha elaborado un catálogo con 400 episodios de efectos fisiológicos en testigos Ovni.

Y en Argentina fueron dos pioneros quienes han realizado artículos: el Profesor Oscar Uriondo en “Los efectos fisiológicos asociados” (CITA 1) y el Lic. Ángel Díaz “Efectos fisiológicos en los encuentros cercanos” (CITA 2).

Lo que faltaba era un estudio estadístico de la totalidad de casos de parálisis en Argentina, con sistema de calificación.

Esto puede ahora concretarse dado la recopilación de cientos de casos de aterrizaje que he realizado (con calificación), que engloba toda la casuística argentina de 1947 en adelante.

LOS EFECTOS FISIOLÓGICOS OVNI

El físico estadounidense James M. McCambell ha estudiado estos casos, llegando a la conclusión que los campos de microondas de alta intensidad serían los causantes de estos efectos, así como los shocks eléctricos, y aún la inconciencia. Pero no todos los casos encajan en esta posibilidad.

Otro recordado físico, el Dr. James Mac Donald, también se había referido a estos casos:

“Estos efectos fisiológicos son lo suficientemente diversos como para que se requiera precaución al intentar generalizarlos. Curiosamente, un hormigueo peculiar y una parálisis parecen reportarse más ampliamente que cualquier otro efecto fisiológico. Una persona que casi ignora las ramificaciones de la evidencia OVNI puede pensar que es absurdo afirmar que las personas han quedado paralizadas en la proximidad de los Ovnis; el escéptico puede encontrar inconcebible que tales casos pasen desapercibidos en la prensa y la literatura médica. Lejos de eso, lamento tener que decir, sobre la base de mis propias investigaciones. Me he encontrado con casos en los que se produjeron graves daños corporales, o en los que hubo un peligro evidente de daño, pero el testigo y su familia encontraron que el ridículo aumentaba mucho más rápido que la simpatía, por lo que se consideró más prudente olvidar todo el asunto en silencio”. (CITA 3)

Dr.James Mac Donald

LOS EFECTOS FISIOLÓGICOS OVNI EN ARGENTINA

Mi trabajo sobre «Aterrizajes de Ovnis en Argentina» (desde 1947 a la fecha), ya contiene más de 2.100 eventos, ordenados y – lo más importante – Calificados.

De ellos pude extraer 577 casos de Efectos Ovni a testigos.

SONOROS comprenden el 52 % (preferentemente zumbidos, o bien silbidos, ronroneos, estampidos, etc. 

SOMNOLENCIA, MAREOS, DESGANO = 5 %

DOLORES, MALESTAR, NÁUSEAS = 10 %

INCONCIENCIA = 9 %

ENCEGUECIMIENTO, IRRITACIÓN OCULAR, LAGRIMEO = 15 %

QUEMADURAS, ERUPCIÓN = 6 %

PUNCIONES, BIOPSIAS = 10 %

DESCARGA ELÉCTRICA, COSQUILLEO = 1,7 %

OLOR A AZUFRE, QUEMADO = 4,3 %

AMNESIA TEMPORAL = 6 %

TELEPORTACIONES = 20 % (por cierto, llama la atención que algunos participantes que están en esto hace años, se sorprendan cuando les comento que las teleportaciones en Argentina superan las 100) (CITA 4)

PARÁLISIS = 16 %

Es sobre este último ítem (Parálisis), que hoy enfocaré en este artículo, y en próximos ahondaré en los restantes.

El fruto de haber podido reunir la totalidad de casos de aterrizajes (difundidos a través de todo medio posible), me permite hoy poder abordar cada variable OVNI (de esas que algunos “participantes” ovni dicen que no hay nada porque el tema está “agotado”, o que los negadores de turno ignoran).

EFECTOS OVNI EN RELACIÓN A LA DISTANCIA

En este trabajo me aboqué al aspecto de los Efectos en relación a la Distancia.

La idea es ver en qué medida la distancia del testigo al fenómeno, genera en él efectos determinados, así como recientemente he publicado mi trabajo sobre los estudios de la relación EXTRAÑEZA – DISTANCIA en Argentina, que muestran claramente que a menor distancia, mayor es la extrañeza. (CITA 5)

Los efectos Ovni en Argentina donde podemos encontrar también el parámetro Distancia es de 258 casos.

En el siguiente gráfico vemos ejemplificada la distancia relativa del testigo al fenómeno.

Los efectos OVNI pueden superar la cercanía, aún superando los 500 metros algunas veces (C.Ferguson)

Como es lógico, la mayor cantidad de casos se dan a menor cantidad de metros. Sin embargo, existen otras 2 cretas menores que van de 51 a 60 metros y la segunda de 101 a 500 mts.

Pude ampliar esta información, discriminando los ítems efectos en VISION, DOLORES, QUEMADURAS, INCONCIENCIA Y PARALISIS.

Como en lo anterior, los efectos se dan mayormente a menor distancia. De todas maneras, hay una importante cantidad de casos que se dan a distancias superando los 50 metros. Los casos de afectación a la visión y los de parálisis son claros ejemplos de ello (Ambos están presentes incluso superando los 100 metros).

Los resultados se advierten en el siguiente gráfico.

PARÁLISIS

Como bien señala el Prof.Uriondo:

“Al igual que las oleadas de calor proyectadas desde el OVNI, la parálisis y la pérdida de control muscular, total o parcial, es el efecto fisiológico informado con mayor frecuencia, y sin duda el más dramático para quien lo experimenta. En estos casos, los testigos son paralizados con la proximidad de los OVNIs; sin embargo sus funciones orgánicas involuntarias, tales como respiración, ritmo cardíaco o visión permanecen intactas.”

El investigador Jean-Luc Jorion distingue dos diferentes tipos de inducción: una “parálisis voluntaria” y otra a la que denomina “automática” con características disímiles.

En el primer caso la inmovilización es claramente deliberada y parece responder a una acción ofensiva o defensiva por parte de los OVNIs o de las “entidades”; a menudo éstas esgrimen una especie de “arma” que emite un “rayo” focalizado sobre el testigo. En esta clase de eventos la parálisis es inmediata.

Respecto a la parálisis “automática”, en ella no se informa sobre la presencia de humanoides ni se describen rayos; suele ser precedida algunas veces por punzadas, sensaciones de hormigueo y shock eléctrico que sufre el testigo. Asimismo, aparece casi siempre en asociación con efectos electromagnéticos en vehículos automotores”.

Y añade Uriondo:

“Son escasos los investigadores que han profundizado el estudio de tales efectos, porque la comunidad médica –que sería la más idónea para evaluar las lesiones y sintomatologías que experimentan los testigos- no manifiesta interés por el tema OVNI o no desea aparecer vinculado a él, y porque, como en el caso de las interferencias electromagnéticas, se requiere un bagaje importante de conocimientos de científicos y técnicos que pocos ufólogos poseen”. (fin de la cita)

En la actualidad Ufológica, estamos – por un lado – ante divulgadores refieren casos “impactantes”. También otros que – aún siendo profesionales y estando en el tema hace años – nos hablan de Ufología “agotada” temáticamente.

Algo une a ambos: el completo desconocimiento de la casuística completa argentina.

Esto que señalamos en cada artículo – como se advierte – no es algo nuevo en nuestro país, pero se ha acentuado cada vez más. Y la investigación es la de campo y la teórica.

Esta última comprende inevitablemente el paso por la estadística y calificación mínima de información.

Con la idea propuesta por el Prof.Uriondo de profundizar en un tema nunca encarado en Argentina, me aboqué a seleccionar todos los eventos de efectos a testigos por parte del fenómeno Ovni desde 1947 a la fecha.

Esto suma un total de 577 eventos (promedio de casi 8 casos de efectos Ovni por año desde 1947).

Dentro de la amplia gama de efectos que he mencionado más arriba, uno en particular es de extrema complejidad. Me refiero a las “Parálisis”.

Esto es lo que se inscribe dentro de el Dr.Jacques Vallée y Eric Davis han denominado como el “Modelo de 6 capas para fenómenos Anómalos” (CITA 6)

La capa 4 es la que comprende los efectos fisiológicos donde encontramos a la Parálisis.

Como bien señala el genial J.Vallée, este tipo de parálisis no es total sino que se asemeja a la Acinesia.

La Acinesia es la incapacidad para iniciar un movimiento. Los testigos OVNI describen las sensaciones de “parálisis” ante Ovnis y/o figuras humanoides, con términos como:

A – Parálisis propiamente dicha

B – Parálisis parcial (generalmente motora)

C – Debilidad o Pérdida de fuerzas

D – Hormigueo e imposibilidad de accionar muscular

Entre otras.

De los 95 casos de parálisis en la casuística OVNI Argentina, hay 72 de ellos donde tenemos registrado el dato de la Distancia.  

En la siguiente gráfica podemos ver esto. Al igual que en otros casos de efectos, también aquí nos encontramos con un segundo máximo acusado desde los 50 metros en adelante.

PARALISIS Y EFECTOS SIMULTÁNEOS

Es muy interesante encontrar efectos análogos a la parálisis.

En el catálogo argentino tenemos 43 datos donde la PARALISIS es acompañada de otros efectos, a saber:

17 casos de efectos EM (Electromagnéticos): A motores varios (motocicletas, automóviles, camiones, apagones, etc.)

13 casos de efectos a Animales: destacándose perros y vacunos.

14 casos de Huellas en el terreno (preferentemente son de quemaduras circulares).

Los datos sobre estos casos podemos verlos en esta gráfica:    

Por último, y sólo a fin ejemplificativo, tome algunos casos de parálisis de testigos al azar del Catálogo Magonia del Dr.Jacques Vallée, con los propios. Si bien la cifra de Magonia es algo inferior, podemos ver las conclusiones en la siguiente gráfica. 

PARÁLISIS VOLUNTARIA Y AUTOMÁTICA / EL HAZ DE LUZ

El haz de luz tiene un factor preponderante en los casos de parálisis. Esto se da tanto desde el OVNI propiamente dicho, como de entidades que acompañan al mismo, y genera una profunda impresión en los testigos.

La parálisis puede darse por un haz compacto o bien por la emisión luminosa misma del OVNI, que suele ser impactante para los testigos cercanos.

De la totalidad de casos de parálisis, en un 23 % de ellos encontramos el haz de luz compacta o luminosidad intensa que paraliza.

Serían las correspondientes a lo que el ya citado analista Jean-Luc Jorión definía como Voluntaria. (CITA 7)

La respuesta del fenómeno hacia testigos se da en 2 situaciones generalizadas:

1 – En respuesta a agresividad de éstos (o intento de defensa)

2 – En acercamientos de testigos al OVNI / ENTIDADES.

El haz de luz compacto genera efectos varios en los testigos.

DISTANCIA EN PARALISIS VOLUNTARIAS

En el estudio de Jean-Luc Jorión (con más cantidad de casos), la curva de casos de parálisis Automática fluctúa con máximos situados entre 30 y 150 metros.

Estudio de Jean-Luc Jorión

En mi estudio, con pocos casos con distancia certera (no estimada), tenemos el siguiente gráfico, donde podemos ver que el umbral tiene su máximo en los 10 metros de distancia, decreciendo luego hasta los 150 metros.

Es evidente – como señalaba Jorión – que el umbral del campo de fuerza paralizante varía de acuerdo a circunstancias exteriores: lugar del aterrizaje y la distancia del OVNI/HUMANOIDES a los testigos. 

RESPUESTA POR AGRESIVIDAD O DEFENSA DE TESTIGOS

Tenemos 9 casos donde los testigos intentaron defenderse o tener una respuesta violenta hacia el OVNI/HUMANOIDES.

Es muy significativo advertir que el fenómeno parece captar las intenciones de los testigos, de alguna manera.

Por ejemplo: un testigo que se encontraba dentro de su domicilio en zona rural, advirtió muy cerca de su vivienda, la presencia de un objeto extraño posado y entidades que se movían en el exterior. Allí decidió tomar su cuchillo con intención de salir, pero inmediatamente quedó sin fuerzas, como si hubiese recibido una especie de shock.

Otro caso de un testigo que tomó un rifle en sus manos, y sin llegar a utilizarlo, recibió inmediatamente la respuesta del haz compacto. 

Este último parte desde el OVNI o sus Entidades, y suele incluso golpear a los testigos, generando efectos secundarios (quemaduras, irritaciones, etc).

La discriminación nos da:

Casos de disparos de testigos a Ovni = 2

Casos de testigos que tomaron armas para disparos pero fueron neutralizados antes = 3

Casos de testigos que tomaron armas blancas pero fueron neutralizados = 4

Representación artística de la revista «Cíclope (España) del episodio del 19 de julio de 1968 en arroyo Tapalqué (Provincia de Buenos Aires). Miembros del Regimiento 2 de Tiradores de Caballería blindada “General Paz” llegaron al lugar por denuncias y habrían efectuado disparos contra unas figuras humanoides cerca del OVNI. Inmediatamente recibieron una respuesta de haces de luz que los paralizaron momentáneamente.

RESPUESTA POR ACERCAMIENTO DE TESTIGOS

La respuesta del fenómeno se da también en los casos de testigos que se acercan al fenómeno (aún sin agresión o defensa por parte de estos).

Esa respuesta llega de dos formas:

A – El Haz de luz compacto

B – Una “fuerza invisible” (bautizada así por los testigos), que les impide avanzar.

Tenemos 12 eventos de estas características. En 5 de ellos la “fuerza invisible” se da en los 50 metros, 60 metros (2), 70 metros y 100 metros.

Una «fuerza invisible» también actúa sobre los testigos ante acercamientos de éstos a Ovni. (C.Ferguson)

PARÁLISIS PARCIALES

De los 95 informes de parálisis, hay 29 que corresponden a Parálisis Parciales. He detallado esto en el siguiente gráfico:

Especificando más éste ítem encontramos:

Parálisis Parciales no especificadas = 0

En Piernas = 10

Brazos = 2

Facial = 1

Habla = 1

“Fuerza Invisible” = 7

Aquí he decidido incluir como parálisis parcial las llamadas por los testigos “Fuerza Invisible”, que no les permite avanzar. 

TESTIGOS ATENDIDOS POR MÉDICOS Y/O INTERNADOS

En los casos de Parálisis tenemos 22 informes de testigos atendidos por médicos, luego de experimentar el efecto luminoso o del propio fenómeno.

En la mayoría de ellos se generaron quemaduras, irritación en la vista, pérdida temporánea del habla, y fuertes shocks.

Hubo 4 internaciones en Hospitales o Centros de Salud (hablamos sólo de las parálisis, ya que en los 577 casos totales de efectos OVNI en Argentina, tenemos muchos mas denuncias de internaciones, y ello será motivo de otro trabajo).

Varios de estos testigos quedaron con secuelas temporarias o prolongadas.

La impresión de algunas de estas personas es algo que más extensamente perdura, más allá de lo físico. 

El caso de Ángel Morassi (21 de junio de 1980 en Arequito, Santa Fe), es uno de los clásicos eventos de efectos recordados de Argentina. Aquí imágenes de la excelente investigación realizada por el desaparecido investigador Luis Reinoso.

DATOS ADICIONALES FINALES

Los OVNIS reportados en Parálisis de testigos poseen estas formas:

Discos = 23 casos / Esferas = 9 casos / Alargados = 3 casos

Son porcentajes que son similares a todas las estadísticas de Argentina, con los objetos discoidales de forma mayoritaria.

En cuanto a los colores detectados en los objetos (y discriminados en todos los casos y en orden decreciente), tenemos:

Rojo = 13 datos / Blanco = 7 datos / Celeste = 6 datos / Multicolor = 5 casos / Azul = 5 datos / Amarillo = 5 datos / Verde = 3 datos / Naranja = 1 dato / Violeta = 1 dato

Son datos coincidentes con el estudio que hizo el colega Ángel Díaz hace años atrás (“Efectos fisiológicos en los encuentros cercanos”)

Las formas discoidales son las que se presentan mayoritariamente en los casos de Argentina. Por ende, también en los eventos de parálisis de testigos. Imagen del caso del 3 de enero de 1975 en Las Grutas (RIO NEGRO – ARGENTINA), con la ampliación de la fotografía de un cuerpo de aproximadamente 10 metros de diámetro.

CONCLUSIONES

A – La Parálisis generada por el fenómeno, puede ser tanto desde el OVNI como por Figuras Humanoides (asociadas o no).

B – En un 57 % del total de casos de Parálisis, encontramos esas figuras humanoides presentes.

C – En los estudios realizados, las parálisis lógicamente se dan de 1 a 10 metros de distancia, pero existe una segunda cresta de 50 a más metros.

D – Las parálisis (Acinesia) en su gran mayoría son totales, y muy fugaces en duración. Apenas el fenómeno se aleja, los testigos recobran su capacidad de movimiento aunque gradualmente.

E – La gran mayoría de los casos de parálisis en testigos se dan por la acción del Haz de luz compacto. Esto puede provenir de lo que definimos como OVNI como por parte de figuras Humanoides.

F – En algunos casos, los testigos no miden las consecuencias de ciertas agresiones hacia el fenómeno, o bien de defensa. Lo mismo ocurre con acercamientos de los observadores, que pueden generar efectos no deseados.      

G – En casi un 40 % del total de casos de parálisis, nos encontramos con efectos adicionales: EM (electromagnéticos), Huellas y Animales (en un caso la parálisis afectó también a un animal).

H – No siempre el fenómeno tiene acciones sin efectos desagradables en testigos. Quienes argumentan lo contrario, jamás han examinado los datos y la casuística Argentina al respecto.

I – Si bien la mayoría de los efectos de Parálisis son producto del imprudente acercamiento del testigo (o su agresión o intento de ello), no debe descartarse una situación que suele no gustar a muchos: hay acciones del fenómeno en algún punto agresivas, llamativas y desconcertantes. Esto en una pequeña proporción de casos. La posible hipótesis de que ello es producto de una malinterpretación del fenómeno no parece ajustarse a la realidad.

J – Como bien señalaba hace tiempo K.Gosta Rehn: “No podemos estimar con exactitud, en qué proporción los daños y síntomas (provocados por los OVNI), son imputables a radiación radioactiva, rayos infrarrojos, ultravioleta, láser o microondas. Ni los radiólogos ni los médicos especialistas han prestado atención a la radiación proveniente de los OVNI”. (CITA 8)   

K – La radiación posible de microondas no sólo genera un efecto físico sino psicológico de gran magnitud.

L – El Dr.Daniel Makravis ha señalado que en tales episodios Ovni (parálisis) “el tono de la postura no se ve afectado, el sujeto mantiene el equilibrio y no se cae. El corazón tampoco es afectado”. Es decir, concluyó que la acinesia asociada al fenómeno Ovni debía actuar sobre el sistema nervioso central. (CITA 9)

M – Es de resaltar que en los 70, primero Christiane Piens (CITA 10) y sus connacionales belgas Guy Vanackeren y Francis Windey (CITA 11) – más tarde – sostenían que la mayor parte de los efectos fisiológicos (náuseas, dolores de cabeza, etc.) que sufren los testigos durante o luego de un encuentro con OVNIS, se deberían al traumatismo nervioso generado por la observación. Vanackeren y Windey, mencionaban que el testigo “se siente fascinado ante la presencia de un Fenómeno excedente de los limites de lo comprensible, pudiendo generar en este, un estado de hipnosis o sofronizacion, es decir, una modificación del estado de conciencia del sujeto. De ahí que el testigo, quede sorprendido ante lo observado”.  Esto implicaría problemas de sueño, alucinaciones, pérdida de la noción de tiempo y espacio, etc. Quizá esto pueda explicarse en algunos eventos, pero hay otros en la casuística argentina que no parecen corresponderse. En especial cuando los testigos no advierten en su totalidad al fenómeno (un testigo rural dentro de su vivienda), y creen que lo que ocurre en el exterior puede ser producto de cuatreros, y al tomar un arma (sin haber salido al exterior), sufren la acción inmediata de parálisis parcial o completa, comprobando luego – por cierto – que dicha acción estaba asociada a una presencia OVNI / HUMANOIDE (o ambas). Por otra parte, estos efectos parecen darse generalmente en casos sobre tierra. En mi archivo de la totalidad de casos de Pilotos en Argentina, no existen efectos de parálisis como se dan en tierra.  

“No podemos estimar con exactitud, en qué proporción los daños y síntomas (provocados por los OVNI), son imputables a radiación radioactiva, rayos infrarrojos, ultravioleta, láser o microondas. Ni los radiólogos ni los médicos especialistas han prestado atención a la radiación proveniente de los OVNI”. (K.Gosta Rehn)

EPÍLOGO

Es lamentable que existan pocos estudios nacionales sobre estos fenómenos, y más aún, que los testigos afectados física y psicológicamente, no hayan recibido la atención debida por parte de las autoridades competentes. Muchos de ellos han tenido secuelas importantes.

Desde 2017 y a nivel oficial en Argentina, el organismo  CIAE (Centro de Identificación Aeroespacial) (CITA 12), no tiene en cuenta estos episodios (ni el 98 % de las variables del fenómeno), y ello parece gozar de la pasividad de la abrumadora mayoría de la comunidad ufológica argentina, que nada dice al respecto. Sólo un puñado de personas estamos denunciando estas cosas. (CITA 13)   

La ineficiencia, ignorancia y prejuicio que existe hoy en el organismo oficial mencionado, y la apatía y prioridad de difusión de “primicias” por parte de la mayoría de los participantes Ovni en Argentina, juegan en contra a la hora de que los testigos reciban el apoyo que corresponde. No se trata de hablar loas a los testigos si después nos da lo mismo que el titular de un ente oficial se refiera a «Don Zoilo» como el exponente del testigo confundido por su falta de conocimientos.

Es bizarro advertir que muchos divulgadores Ovni de Argentina prioricen sus discursos sobre o contra autoridades extranjeras (llámese Pentágono, NASA, CIA, NORAD, FBI, etc.), y vean con displicencia o tengan un silencio sepulcral de lo que ocurre en nuestro propio lugar. 

En este mismo instante, un ocasional testigo en Argentina, puede experimentar la presencia OVNI, y sufrir algunas consecuencias de los efectos que hemos reseñado. Y quedará abandonado a su suerte, mientras sólo se resaltan las fotos con “excrementos de aves sobre parabrisas”.

Ya no se trata que en una oficina oficial se tenga o no en cuenta un dato técnico. Nos preocupa lo otro, porque para quienes investigamos, hemos visto y charlado cara a cara con estas personas y pudimos palpar las consecuencias y secuelas en este tipo de casos.

Todo aquel que se precie de ser “investigador” tiene una responsabilidad al respecto, y en este caso – al menos – es señalar que estos hechos siguen ocurriendo sin que desde lo oficial se le preste debida atención.

Nada mejor que cerrar esta nota, nuevamente con la acertadísima cita del Dr.J.Vallée, quien nos dice al respecto:

“La primera responsabilidad del investigador es para con el testigo y no para con el fenómeno ovni. El término medio de testigos se encuentra en un estado de shock porque han tenido una experiencia muy traumática, que les cambiará sus vidas…él testigo necesita ayuda más inmediata por ser un ser humano que está totalmente confundido por una experiencia perturbadora. Desgraciadamente este elemento ha sido eliminado. La mayoría de los investigadores de Ovni trata de parecer “profesionales” de modo que ignoran el aspecto humano, y por consecuencia sus propias obligaciones éticas. Yo quiero convencer a mis amigos que están en la investigación ovni, que nunca tenemos una elección entre obtener información interesante sobre ovni y brindar chances a la vida de un ser humano; allí debemos olvidar la información ovni.”

Carlos Ferguson

Reproducción parcial o total con previa autorización del autor – Imagen de titulo: PhotoVision.

El autor: Fue el primer asesor de la Fuerza Aérea Argentina (2011 a 2017) en Ufología. Carlos Ferguson se desempeña en àres de Educación (Provincia de Buenos Aires – Argentina), y tareas administrativas. También es profesor de dibujo artístico y se dedica a investigar el tema OVNI desde hace 48 años, cuando, siendo no creyente, tuvo un encuentro cercano a no más de 35 metros de distancia con un OVNI en forma de disco. Tiene cursos en Tecnología Satelital, Teledetección y Sistemas de Información Geográfica. Autor de 7 libros y la mayor recopilación de casos de desembarco en Argentina, con hechos clasificados. También ha realizado estudios sobre casos de pilotos y ovnis en Argentina, así como sobre objetos submarinos y los más recientes, sobre los efectos fisiológicos y electromagnéticos en los testigos. Cientos de charlas y notas a lo largo de casi 5 décadas lo muestran con una línea de trabajo ajustada a los parámetros de la estadística.

CITAS

CITA 1

Prof.Oscar Yriondo – “Los efectos fisiológicos asociados”

CITA 2

Lic. Ángel Díaz “Efectos fisiológicos en los encuentros cercanos”, Ufo Press nro.17, julio de 1983.

CITA 3

Declaración realizada por el Dr. James Mac Donald en el Comité de Ciencia y Astronáutica de la Cámara, 29 de julio de 1968.

CITA 4

Algunos de estos expertos en “récords” afirman inexactitudes, con el fin de adecuar lo que sostienen. Un ejemplo es de quien promueve en distintos medios que: “En Argentina casi no hay abducciones  y eso se da sólo en EE.UU”. Evidentemente no tiene idea de la cantidad de teleportaciones y casos, porque nunca ha realizado una recopilación estadística seria. Lo mismo ocurre cuando habla de constantes inconducentes, o bien de “récords” que sólo existen en su cabeza. 

CITA 5

Carlos Ferguson – “La relación DISTANCIA – EXTRAÑEZA es confirmada por la casuística Argentina” =  https://www.carlosferguson.com.ar/archivos/6601

CITA 6

Dr.Jacques Vallée = https://www.jacquesvallee.net/wp-content/uploads/2018/11/Incommensurability_Orthodoxy_and_the_Phy.pdf

CITA 7

Jean-Luc Jorion – “Parálisis: el árbol que oculta el bosque” – Stendek nro.42 – diciembre de 1980

CITA 8

K.Gosta Rehn – “Dossier Ovni” – 1978, Barcelona, Ediciones Martinez Roca.

CITA 9

Dr.Jacques Vallée – “Confrontaciones” – Reediciones anómalas, p.141

CITA 10

Christiane Piens, «Certains effets dits Physiologiques seraint-ils d’origine psychosomatique «?, – revista Inforespace nro.26, p. 36/37.

CITA 11

Guy Vanackeren y Francis Windey – «Etude sur les effets physiologiques et psychologiques provoqués par les Ovnis” – revista Inforespace nros. 26 y 27

CITA 12

El CIAE (Centro de Identificación Aeroespacial),  no ha podido ofrecer explicación a casos concretos, como las aeronaves no identificadas ingresadas al territorio argentino por Tierra del Fuego (Patagonia), del 27 al 30 de julio de 2022 y captados por radar desde Río Grande. El autor de la nota fue el primer ufólogo asesor civil de la misma, sumando luego a 4 colegas más. Mediante un artilugio, el actual titular de Ciae, exigió una especialización en imágenes (dado que el enfoque de tal entidad ahora es sólo el estudio de imágenes de fotos y videos). Con esa excusa fuimos desplazados, colocando en su lugar a asesores extranjeros que tampoco cuentan con ese requisito. En Argentina, Ciae tiene algunos defensores dialécticos en las redes sociales, y algún ex ufólogo como Alejandro Agostinelli y otros personajes que pululan en Ufología desde hace años, sin destacarse en investigaciones o trabajo teórico alguno en ellos.

CITA 13

Los investigadores que hemos denunciado la ineficacia del CIAE somos Alberto Brunetti, Rubén Romano, Luis Pacheco y quien esto escribe.