EL ASPECTO CLIMÁTICO EN LA CASUÍSTICA OVNI ARGENTINA

Por CARLOS FERGUSON

Dentro de la gran cantidad de variables a analizar en la cuestión Ovni de Argentina, se hacía necesario determinar mínimamente las condiciones climáticas al momento de ocurrir los casos argentinos.

Ya en los 70, Claude Poher y Jacques Vallée habían confirmado que alrededor de un 25 % de los informes oficiales franceses contiene información acerca de las condiciones meteorológicas.

Un simple estudio estadístico (sobre 258 casos franceses), indica que el fenómeno es visto con MENOR frecuencia cuando las condiciones meteorológicas son adversas.

Las estadísticas fueron computadas para casos franceses y no franceses separadamente, y se encontró que eran casi similares, con un 57 % de todos los avistajes realizados bajo condiciones de cielo despejado, de un 15 o 20 % con cielo parcialmente nublado, 10 % con cielo nublado y 8 % con cielo cubierto, y el restante porcentaje pequeño con lluvias. 

Ese estudio es fundamental, ya que sumado a otros aspectos, podemos aventurar qué es lo que realmente ven los testigos, en qué condiciones y en cuánta duración.

Y también determinar indirectamente, si han sido confundidos con fenómenos identificables en parámetros de distancia y condiciones climáticas (visibilidad atmosférica).

El
El Dr.Jacques Vallée y el Dr.Claude Poher quienes fueron los autores del estudio sobre las condiciones meteorológicas en los casos Ovni.

Sólo a modo de ejemplo, el caso fotográfico registrado en Namur (Bélgica), el 5 de junio de 1955.

Este evento fue reseñado por el gran Aimé Michel en su estudio denominado: “Tres fotografías genuinas – Revisión de platillo volador – vol. 7, n°1, enero-febrero 1961”

En el mismo, un testigo anónimo (obrero), pudo captar con su cámara, la presencia de un platillo volador en 3 imágenes.

Las fotografías fueron analizadas por un meteorólogo y confirmadas como auténticas. El experto determinó que la estela de vapor que se percibe, fue provocada por una auténtica condensación atmosférica, que no pudo haberse formado a menos de una altitud de 1.500 metros (aproximadamente 5.000 pies).

Por lo tanto, el objeto debe haber poseído unas dimensiones que rondan los 12 metros (aproximadamente 40 pies).

Un astrónomo profesional – a su vez – hizo el análisis del negativo, y concluyó que las fotos no estaban trucadas (no hubo montaje alguno).

Según el testigo, el objeto hizo aceleraciones y detenciones. A  medida que desaceleró, descendió y se formó la estela de vapor. Luego volvió a ascender. Finalmente aceleró mientras el rastro de vapor desaparecía, y terminó perdiéndose a gran velocidad.

Estamos ante imágenes logradas a gran distancia de la cámara, con la conjunción de visibilidad atmosférica acorde.  

5 de junio de 1955 – Namur (BÉLGICA): las extraordinarias y auténticas fotografías de un OVNI discoidal a gran altitud y en condiciones de visibilidad acordes.

Los datos que los lectores verán en este artículo, al igual de los trabajos que he publicado recientemente sobre efectos electromagnéticos, la ley horaria, los efectos en la visión, los efectos de sonido, los efectos cutáneos y de parálisis, no son producto de opiniones personales o hipótesis.

Por el contrario, son datos crudos del más significativo y mayor catálogo a la fecha en Argentina, sobre “Aterrizajes”, que comprende el estudio desde 1947, totalmente clasificado bajo parámetros internacionales, con más de 30 años de dedicación. Sus fuentes de procedencia son globales.

No existe otro catálogo similar en Argentina. Los que ofrezcan versiones distintas al mismo, al menos deberán contar con un estudio similar para confrontarlo. Mientras ello no ocurra, esta información es la que emerge realmente del total de nuestro país, más allá de algunos disparates, teorías alocadas, o “récords” inexistentes que alguno pretende fomentar.

Ya he señalado en otras notas, la falencia investigativa en distintos datos faltantes en las casuísticas.

Un ejemplo fue lo ocurrido en un período tomado de 1991 al 2002, de los archivos de la Red Argentina de Ovnilogía (RAO).

Como coordinador central efectué un análisis estadístico de los casos que teníamos en archivo, especialmente los provenientes de los participantes ufológicos. Esos casos fueron publicados en todos los boletines por entonces y superaban los 1000.

La sorpresa fue mayúscula: en 8 ítems del test de Extrañeza y Credibilidad del Dr.Hynek, nos encontramos con faltantes dramáticas (las vemos en color rojo en la gráfica más abajo).

La condición climática fue la peor, ya que en un 95 del 100 % de los casos, no se informa en absoluto ninguna condición climática.

Esto muestra una omisión notable en las investigaciones y encuestas. Ningún ámbito académico admitiría semejante situación ni material con tales omisiones.

Por tal motivo es fundamental contar con la mayor casuística y datos lo más abarcativos, para enfrentar a los rumores y divulgaciones con las que nos enfrentamos en Ufología Argentina. 

Evidentemente el factor climático no suele ser utilizado ni mencionado en una abrumadora mayoría de informes.

El porcentaje de datos faltantes en la casuística argentina (en color rojo), de acuerdo a mi estudio de la casuística de la Red Argentina de Ovnilogía.
(Gráfico C.Ferguson)

En el catálogo de aterrizajes también tenemos la misma situación que en las casuísticas de la RAO ya mencionado. La condición atmosférica de los casos es otra de las grandes faltantes.

Una opción – imposible por el alto costo – era solicitar la información climática en los días de los casos, al Servicio Meteorológico Nacional.

Ello tiene dos dificultades: la antigüedad de muchos casos y el alto costo implica averiguar información de 2.000 casos.

Estas son tareas que un organismo oficial abocado al tema podría hacer (por cierto, un organismo oficial eficiente en el tema, y no como el que tenemos desde 2017 y actualmente en Argentina).

3 de julio de 1960 – Yacanto (Córdoba – Argentina): El Capitán Hugo Luis Niotti logra captar la mejor foto Ovni de Argentina hasta la fecha, en esta conocida imagen. Fue lograda en condiciones meteorológicas algo desfavorables. Como bien señala el colega Lic. Angel Díaz: clima invernal, frío y húmedo – aproximadamente 15 grados y 80 % de humedad, con lloviznas intermitentes; las nubes (estratos cúmulus y nimbus stratus) y la neblina, reduciendo la visibilidad horizontal a 500 metros, y el “techo” a 100-130 metros de altura. Sin embargo, es posible distinguir al fondo, lomas de casi 1.000 metros de altura. La imagen fue analizada por el Servicio de Informaciones de Aeronáutica, quien confirmó la presencia de ese objeto.

Antes que nada, es clave entender la diferencia entre el tiempo atmosférico y el clima.

En el primero hay 3 factores a tener en cuenta: las precipitaciones, el viento y la temperatura.

El clima es el tiempo que predomina en un lugar durante un largo periodo de tiempo, dependiendo de otros factores.

Por ello, estamos hablando de “condición atmosférica” preponderantemente.

Es allí donde encontramos el estado en que se encuentra la atmósfera en cortos períodos, generalmente horas o pocos días. Y allí también apuntamos para estudiar denuncias OVNI.

(Imagen: Anja – Pixabay)

Dada la imposibilidad de contar con todos los datos de casi 2.000 casos de aterrizajes, la manera fue determinar por distintas vías, las condiciones atmosféricas que tuvieron.

Para ello se tomaron los pocos casos donde sí se detallaban esas condiciones. Y a ello se agregaron los eventos que pudimos determinar por vías indirectas (incluídos algunos casos fotográficos que nos permiten detectar aspectos climáticos benignos).

La muestra inicial que tenía señalada la condición atmosférica de casos argentinos, era similar – en porcentaje – al estudio de Poher y Vallée.

De todas maneras, a los datos primarios que teníamos, pudimos agregar otros donde la referencia directa o indirectamente, no nos hablaba de una condición climática adversa.

En el total de casos de aterrizajes, las fuentes de procedencia de los mismos comprenden datos de investigadores de campo, comunicaciones e investigaciones personales, casos difundidos en todo medio de prensa (radio, televisión, diarios, internet), medios oficiales, entre otras. 

La muestra donde hemos definido las condiciones climáticas abarca la totalidad de las provincias Argentinas. Miles de kilómetros de Norte a Sur y Este a Oeste con todos los climas (en Argentina contamos con climas húmedo, seco, templado, frío y calor tropical).

En todas las provincias argentinas tenemos datos sobre condición climática
(Gráfica: C.Ferguson)

Del total podemos confirmar 933 datos con clima aceptable o bueno y 32 con malas condiciones (Total 965). Esto es un 54 % del total de los casos de aterrizajes en Argentina.

Del total de casos de aterrizajes en Argentina, el dato específico sobre condiciones climáticas es el 54% y el 7% son datos «probables».
(C. Ferguson)

Adicional a esto, he repasado los más de 1.000 casos restantes, para poder encontrar lo que podemos considerar como datos “probables” de clima.

Podemos denominar probables a los casos donde podemos inferir que las condiciones climáticas eran medianamente aceptables.

Para ello podemos encontrar algunas descripciones de los testigos que pueden ayudarnos:

Etc. En general, todo lo descripto se realiza en condiciones mínimamente “aceptables”.

También se han incluido los eventos fotográficos donde se traslucen esas mismas condiciones en las imágenes.

Una vez obtenido esto, podemos agregar 114 nuevos casos de clima aceptable.

Esto nos da un total de 1079 casos argentinos de aterrizajes, a los cuales les podemos inferir una condición climática.

Distintas tareas realizadas por los testigos ocasionales, pueden ayudarnos a determinar datos «probables» sobre la condición climática.
(C.Ferguson – Imágenes Pixabay)

Vemos la actividad por décadas. Las crestas preponderantes seguramente se deben a la mayor actividad de investigadores desde los 60 hasta el año 2000.

(Gráfica C.Ferguson)

El decrecimiento desde entonces implica mucha faltante de datos debido a la prioridad de la mayoría de los participantes Ovni, por difundir, obviando información general de los casos. 

Cuando sumamos los datos probables, la brecha existente entre los datos de “buen” y “mal” condición climática se ratifica.

Condiciones climáticas sobre 965 datos (933 aceptables y 32 desfavorables), en el historial de casos de Aterrizajes de Argentina. (C.Ferguson)

Sabemos que existen factores meteorológicos que influyen en la visibilidad. De ellos depende un promedio de visibilidad de acuerdo a sus presencias:

Más allá de estas, era importante determinar en este catálogo, cuántos eran los casos donde disponíamos de dos condiciones:

1 – Condición atmosférica

2 – Distancia del testigo al OVNI

Pude extraer 448 casos (432 con condiciones que podemos considerar buenas o muy buenas y solamente 16 con malas condiciones).

En vista de estos datos, y aún cuando hay una diferencia notable entre ambos, podemos inferir el promedio de distancia de visualización en los eventos de buen y mal tiempo.

El promedio de los eventos con “buen tiempo” permiten una visualización promedio de casi 539 metros, mientras los de “mal tiempo”, la misma llega a los 162 metros promedio.

La observación de los casos OVNI es acorde con las condiciones atmosféricas imperantes.

No estamos ante fantasías, alucinaciones o alcoholismo.

La visibilidad de testigos en casos de distancia al OVNI muestra la lógica mayor extensión en los casos de buen tiempo. 532 metros para ellos, y 162 en los casos de clima desfavorable. Esto es promedio estadístico. (Gráfica C.Ferguson)

Este es un tema muy interesante, para futuros estudios adicionales, sobre los casos recibidos en dispares lugares geográficos de Argentina.

Ya sabemos que más allá de densidad poblacional, y al dividir al país en 4 regiones geográficas claras, la cantidad de observaciones por habitante por km cuadrado tiene preponderancia, en espacios mayormente despoblados, cumpliendo a rajatabla la Primera Ley Negativa del Dr.Jacques Vallée. Esto en nuestro país se da perfectamente. 

En países con limitación geográfica estos estudios no son más probables de realizar.

La Argentina goza – en ese sentido – con el privilegio de contar con un amplísimo territorio y distintos climas.

Son detalles adicionales, pero analizaremos la visibilidad para testigos en distintas zonas geográficas y climas: el caso de BUENOS AIRES (zona central) y la PATAGONIA (en el extremo sur). 

El clima varía en distintas épocas del año, pero sólo nos abocaremos a lo general.

En Buenos Aires contamos con una densidad poblacional de 57 habitantes por kilómetro cuadrado, mientras que en la Patagonia, la densidad es de sólo el 2,2 %.

En la provincia de Buenos Aires existen 4 tipos de microclimas diferenciados, predominando el templado. Las precipitaciones van de 600 a 1.000mm en gran parte del área metropolitana de Buenos Aires.

En la Patagonia la variedad de climas es notable, predominando el  templado a frío, con temperaturas que disminuyen notablemente de norte a sur (los Andes Patagónicos también influyen de manera notable en ese clima variado). Los vientos secos luego de los bosques patagónicos, han generado un desierto árido y más fresco en la estepa. Ese lugar es azotado por vientos permanentemente, algunos de los cuales superan los 100 km ph.

Como vemos en los gráficos ilustrativos, los días de sol, nublados o precipitaciones son muy dispares, así como también la “Rosa de los Vientos”.

Las condiciones climáticas de la zona de Buenos Aires y la Patagonia Argentina (velocidad de vientos – Cielos nublados y días de precipitación – cantidad de precipitación y Rosa de los vientos), son dispares y permiten un análisis en base a los testimonios OVNI en cuanto a visibilidad. (Gráfica C.Ferguson)

Era interesante ver hasta que punto en ámbitos tan distintos, la visibilidad de los testigos al percibir un supuesto OVNI se manifiesta.

Para ello, hemos tomado todos los casos donde tenemos “Distancia” y “Dato meteorológico” en Buenos Aires y la Patagonia.

Vemos la gráfica que nos muestra los porcentajes de distancias, que son muy coincidentes entre ambas. Parecen no existir diferencias entre ellas.

(C.Ferguson)

Y ahondando más la cuestión, he realizado un cálculo de promedio de visibilidad de ambos lugares (Bs.As y Patagonia).

Allí surge un dato realmente llamativo: el promedio de distancia de visibilidad OVNI en Bs.As es de 424 metros, y el de la Patagonia es de 440 metros.

Esto puede acercarnos a una conclusión primaria: no parecen existir diferencias de visibilidades aún en ámbitos climáticos tan dispares (en general). Un estudio posterior ameritará comparar los informes de acuerdo a las estaciones.

Los promedios de visibilidad OVNI entre Buenos Aires y Patagonia no presentan grandes diferencias, siempre que las condiciones sean aceptables. (Gráfica C.Ferguson)

A – Aún sin contar con toda la información necesaria, los datos de Argentina, indicarían que los eventos OVNI se dan mayoritariamente en buenas o aceptables condiciones meteorológicas. El estudio de Vallée y Poher ya lo habían estipulado en su estudio en los 70, aunque contaban con archivos de la meteorología nacional.

B – Ello minimiza en gran parte, la posibilidad de que los testigos hayan sido confundidos con fenómenos identificables en parámetros de distancia y condiciones climáticas.

C – En los casos estudiados de argentina (donde contamos con datos de distancia y clima), el promedio de visibilidad en condiciones de buen tiempo, supera en visibilidad – como es de esperarse – a los de condiciones malas. Esto desestima a aquellos detractores que argumentan que los casos OVNI son pura “invención de creyentes”. 

Acertadamente señala el astrofísico Claude Poher:

Y formula como hipótesis que el Fenómeno es:

El astrofísico Pierre Guerín, lo ratifica:

D – La visibilidad en zonas climáticas dispares de Argentina (Bs.As y Patagonia), no parecen mostrar diferencias (nos referimos más que nada, a la observación de un cuerpo sin obstáculos de terreno, donde en Patagonia, gozaría de una amplitud casi completa). Lo que define una observación es el factor climático en cada lugar donde ocurre. (CITA 4)  

Es fundamental el análisis lo más completo de los casos, para determinar variables que – en general – no son tenidos en cuenta por la gran mayoría de los participantes OVNI y divulgadores.

Estos presumen de realizar “investigaciones”, cuando en realidad se trata de simples reportajes priorizando “primicias” impactantes, en lugar de los datos que consideran “aburridos”.

Pero si coincidimos que el eje de los casos son los testimonios principalmente, es clave que se apliquen metodologías en la encuesta.

Cada testigo en manos de simples divulgadores es una cuasi pérdida del caso, generando una contaminación del relato.

Entre los detalles mas faltantes en los informes se encuentra la condición atmosférica – como ha quedado demostrado en una simple encuesta de información de casos.

Cada nuevo investigador podrá realizar una aporte fundamental al tema, cuando considere la necesidad de aplicar criterios básicos en la encuesta ufológica.

Carlos Ferguson

El autor Carlos Ferguson se desempeña en área Educativa en la Provincia de Buenos Aires. Es también profesor de Dibujo artístico y se dedica a la investigación del tema Ovni desde hace 48 años, cuando siendo un descreído, tuvo un encuentro cercano a no más de 35 metros de distancia con un OVNI discoidal. Fue el primer asesor civil en Ufología para la Fuerza Aérea Argentina (2011 a 2017). Posee cursos en Tecnología satelital, Teledetección y Sistemas de Información Geográfica. Autor de 7 libros y de la mayor recopilación de casos de aterrizaje en Argentina, con eventos clasificados. También ha realizado estudios sobre casos de pilotos y Ovnis en Argentina, así como objetos subacuáticos y los más recientes, sobre los efectos fisiológicos en testigos, y electromagnéticos. Cientos de charlas y notas durante casi 5 décadas, lo muestran con una línea de trabajo ajustada a los parámetros de estadística.

Prohibida su reproducción parcial o total sin la expresa autorización del autor. (Imagen de nota: «Anja, Pixabay)

CITA 1: https://www.tiempo.com/ram/1041/meteorologa-viila-visibilidad-y-los-factores-meteorolgicos-que-influyen-en-ella/

CITA 2: “El nuevo desafío de los Ovni, J.C.Bourret – “Dos preguntas esenciales”, Dr.Claude Poher – Ate, Barcelona, 1978 – p.182)

CITA 3: “El nuevo desafío de los Ovni, J.C.Bourret – Ate, Barcelona, 1978 – p.225)

CITA 4: “El estado óptico de la atmósfera depende directamente de las condiciones meteorológicas; y el parámetro básico para su descripción es el coeficiente de extinción visual.

https://www.tiempo.com/ram/2416/consideraciones-bsicas-sobre-la-visibilidad-atmosfrica-el-problema-de-su-cuantificacin/