“LOS RACIONALISTAS DOGMATICOS EN ARGENTINA….o LAS DESVENTURAS DE UN DESINFORMADOR OFICIAL” (Por Carlos Ferguson)

“La Fuerza Aérea no ha podido asumir que asuntos de primordial significado científico estaban siendo meticulosamente ocultados bajo una alfombra de ineficiencia” (Dr.James Mac Donald – 1969)

 

«Y aquí saluda Don Zoilo
A uste que ridiculiza
Que veamos luces y almas
Puede a uste darle risa
Pero le aseguro compadre
Sin sonrojarme ni medio
Que ojala uste se lo encuentre
Y ahí va a rajar de prisa»
(C.Ferguson)

 

En varias oportunidades últimamente me he referido a los desinformadores Ovni en Argentina, para mostrar cómo trabajan y cuáles son sus artilugios intentando invalidar a los NO IDENTIFICADOS.

Cuando tal situación se enmascara desde lo oficial, la cuestión es más delicada.

Me referiré a algunos detalles de cómo operan los Desinformadores de turno (aún oficiales).

Generalmente los “Desinformadores” utilizan un sistema acomodando cada circunstancia a lo que quieren trasmitir: “LOS OVNIS NO EXISTEN”. Un excelente material del recordado Dr.Willy Smith, mencionaba esto y me permito esbozar algunos conceptos, en especial, para quienes recién se adentran en el tema.

Algunas de las formas utilizadas por los Desinformadores son:

  • INVERTIR LOS PUNTOS DE VISTA: (alejar del eje una cuestión particular concreta, para llevarla a lo general. O lo contrario: de lo general a un caso particular negativo.)

  • INFORMACIÓN FRAGMENTADA: suelen utilizar esto en casos complejos con grupos de testigos independientes. La técnica implica tratar de explicar al caso con una sucesiva catarata de causas. El ejemplo más claro puede ser el famoso Caso Bariloche del 31 de julio de 1995 (máquina pisanieve – la Luna y Venus – reflector).
  • INFORMACIÓN FALSA O DEFORMADA: A veces se presenta en forma sutil, en otras autoritarias. Uno de los ejemplos clásicos es cuando se refieren al estudio del Proyecto Condon, como “el estudio más científico y contundente que probó que los Ovnis no existen”, u otras parecidas. Otra es señalar que “todos los Ufólogos son crédulos creyentes” (aun cuando sabe perfectamente que tal generalización es irreal) o bien “todos los ufólogos son comerciantes” (porque alguno muy conocido lo fue), etc.
  • OMISIONES DELIBERADAS: El refutador acomoda la situación simplemente IGNORANDO todo elemento que no se adecúe a la “explicación convencional”. Esto lo hace sin remordimientos, siendo una actitud no sólo censurable, sino inaceptable en el dominio de la ciencia.

Los Desinformadores pueden menospreciar a la Ufología con otros elementos.

Por ejemplo, notificando haber participado en algún curso de Ovnilogía o grupo de dudosa trayectoria ufológica, indicando que ese es el NIVEL COMPLETO de la Ufología, intentando menoscabar a ésta como disciplina racional y seria.

EL DESINFORMADOR OFICIAL

Pero tenemos actualmente un ejemplo clarísimo y bien visible de un Desinformador oficial.

Además de adolecer de ignorancia completa en materia ufológica, confunde términos como algunos de sus “asesores externos”.

En efecto: no puede o no quiere discriminar racionalmente que OVNI en ninguna parte de su sigla contiene la connotación alienígena o extraterrestre, y así como quisieron extirpar la palabra “plato volador” también desean que desaparezca el término Ovni.

Él dice que la gente confunde el término con lo alienígena – sin darse cuenta, o sabiéndolo – que está haciendo exactamente lo mismo (es un creyente a la inversa).

Mi próximo artículo se abocará a las Comisiones Oficiales en el mundo, donde TODAS dan un porcentaje que ronda del 3 al 5 % del total de casos.

A este residuo sólo se lo puede llamar de una manera: NO IDENTIFICADO, o bien

  • NO CLASIFICADO
  • NO CATALOGADO
  • NO ESPECIFICADO
  • NO ENCASILLADO
  • NO ENCUADRADO

Y todos los términos que se le quieran añadir.

Pero sin muchas vueltas, ese es el porcentaje que no se ajusta a toda explicación posible.

Dada su miope postura, el desinformador retirado no quiere aceptar las evidencias de otras comisiones y se resiste como un viejo cruzado, alejado del soplo de los nuevos vientos, sólo con el consenso de algunos pocos que retrógradamente piensan como él, y algunos “cadetes del espacio”.

Igual encono muestra hacia las fotos de “platillos o cuerpos discoidales”, y en su exacerbado narcicismo, ha llegado a afirmar – sin sonrojo ni disimulo y ante un medio de prensa – que “si hubiesen naves extraterrestres jamás tendrían la forma de un plato volador”. (SIC)

Nos preguntamos qué halo de mágico vaticinio hace que diga tales cosas con tanta seguridad rayana de un fanático (ni Von Braun o Hermann Oberth se atrevieron a tanto).

El desinformador se vanagloria de las palabras de un representante de Comisión Oficial de un país vecino (Chile), que afirmó ante la CNN que no tiene asesores con el rótulo de “UFOLOGOS”.

Pero – eso sí – obvia una parte del relato: el mismo representante agregó que además de tomar contacto con agrupaciones privadas del tema (o sea, ufólogos), poseen un porcentaje de “3 a 4 % de casos que no pueden explicar bajo ninguna circunstancia”.

“ASESORES EXTRANJEROS SIN ESPECIALIZACIÓN CIENTÍFICA”

Con igual ahínco, el desinformador oficial argentino celebra otra frase del citado titular de la Comisión Chilena, que afirma que en sus filas sólo hay “profesionales en distintas ramas de la ciencia”.

Pero se hace el distraído cuando su propio “Centro de Identificación”, cuenta ahora con 2 asesores extranjeros cuya “especialidad en Ciencia” es ser periodista uno y empleado de una empresa privada el otro (¿?).

Ergo: no tienen profesionalización científica alguna ninguno de los dos, y su única condición de estar en tal Comisión es ser “amigos” del desinformador. Ser “Periodista” y “empleado” no son “especialidades científicas”, pero el meticuloso desinformador tan detallista para algunas cosas, se hace el distraído para éstas.

Ni que hablar el profundo grado de desinformación de ambos asesores: uno confunde al otro en una actividad en la cual nunca participó y además también desinforman con profunda ignorancia sobre aspectos varios, como cuando se refirieron errónea y negativamente a la CRIDOVNI (Comisión Oficial de Uruguay), desconociendo por completo la información real de dicha comisión, que es única y ejemplar en el mundo (El desinformador oficial incluso se hizo eco de esos datos erróneos brindados por sus “asesores científicos” – que no son científicos – y llegó a aventurarse dando consejos de cómo debe ser una comisión del país vecino, lo que muestra su desubicación y atrevimiento).

Y si bastaba algo para mostrar las dotes del otro “asesor” extranjero (residente en EE.UU), ha afirmado sin sonrojarse:

  • Que sólo hay un 1 % NO IDENTIFICADO EN EL MUNDO (dato falso – Fake)
  • Que los OVNIS seguramente son ARMAS SECRETAS DE UNA POTENCIA (desconocemos como puede saber tal cosa, porque entonces dejaría de ser un secreto y hubiese sido un descubrimiento increíble y trascendente!) (Fake)
  • Que los OVNIS NO SON CAPTADOS POR RADAR (hay decenas de casos en el Mundo entero que contradicen tal disparate).(Fake)

Es decir: datos falseados – uno tras otro – o sólo existentes en su imaginación.

Volviendo al “desinformador mayor”, muy conocedor de su área técnica, no puede salir de allí ni por un instante, y pretende circunscribir todo el resto a aves, insectos, barriletes y cualquier cosa que vuele (siempre con videos y fotos), y obviando todo caso EN TIERRA a no ser que sepa (de antemano) que se trata de una caída satelital anunciada por la NASA.

Pero algo que no sea convencional a sabiendas, será rotundamente extirpado de la posibilidad de estudio (aún con huellas u otros efectos rotundos del fenómeno, a animales y personas).

Por ende, el desinformador sólo elige 10 o 15 casos de los llegados todo el año y presenta un informe parcializado, creyendo que con eso da “solución” al tema, a la prensa y al pueblo.

Se dedica ahora a ahondar en el tema “AVES” con biólogos, porque es lo que aparece en muchas fotos de supuestos OVNIS (cosa que ya los Ufólogos venimos descubriendo desde hace décadas, sin ayuda de programas especiales o gastos).

La pregunta sería: ¿Y si aparece una foto de un platillo?…¿llamará a ufólogos para consultarles? ¿o a una fábrica de vajilla?.

Nadie lo sabe, porque igualmente el material escogido para “informes anuales” se selecciona arbitrariamente y seguramente eligiendo los más destacables en extremo negativos (habrá que revisar algún día ese material completo, y todas las fuentes de procedencia de las mismas).

El desinformador oficial habla de sus “dotes de conocimiento ufológico”, refiriéndose a dos casos que repite en forma aburrida y constante (uno de hace 40 años y el otro de hace 35), como que fueron sus “descubrimientos” en este campo ufologico del cual descree y combate. También cita hasta el hartazgo – y en cuanta oportunidad se le presenta – el  haber participado en un “Cursillo de Ovnilogía” como la fuente de toda su desinspiración.

En suma: no sabe absolutamente nada de Ufología, no ha ahondado en material serio, desconoce estadísticas y trabajos profesionales, no puede discriminar entre las distintas tendencias, no hace revisión adecuada de literatura, y como ha quedado demostrado en mi artículo anterior: de 61 variables del fenómeno Ovni, sólo analiza “de refilón”, una sola.

Pero se jacta de ser conocedor de todos los descubrimientos ufológicos y de reírse irónicamente de ufólogos y de los testigos, a los que suele citar como “Don Zoilo”.

El desinformador oficial – en realidad – no da pie con bola.

Azorado ante la reciente noticia desde el Pentágono, y el interés de Japón, han sido un golpe directo a su arrogancia, y – aunque jamás lo admita hacia afuera – sólo le queda dar a entender que todo se trata de una monumental confusión.

Lo que la Marina norteamericana, sus radares y experimentados pilotos militares no han podido, el “señor” ya lo está determinando.

ESTAR DESAFASADO DE LOS TIEMPOS…

Nada peor para alguien estar desfasado de los tiempos. Hay innumerables ejemplos históricos de esto.

Estar al tanto de los últimos prototipos o datos astronómicos es importante.

Pero también lo es advertir el eje estratégico hacia donde están yendo las grandes potencias con el tema OVNI y lo que difunden abiertamente, como las recientes informaciones del Pentágono.

Pero el soberbio personaje, desde una oficina solitaria (que ha convertido en un “laboratorio especializado en videos y fotos»), no percibe todo esto por su anacronismo (postura que sólo podía entenderse en los años 50, con las mismas “explicaciones” que daban personajes como Philip Klass y Donald Menzel).

El problema para el desventurado desinformador oficial, es que las noticias como las del Pentágono seguramente continuarán, y lo harán indigestarse más de una vez.

Para colmo de males, sus “asesores científicos” (“periodista” y “empleado privado”) están más perdidos que “turco en la neblina” en materia Ufológica, porque aunque hayan tenido alguna formación inicial interesante, están totalmente desactualizados (al menos, uno de ellos).

Pierre Guerín (astrofísico famoso por su aporte para el estudio de los anillos del planeta Saturno), dijo palabras ejemplares para estos sujetos:

“El mejor medio de no encontrar una prueba es no buscarla. Los que afirman que en los testimonios no puede encontrarse la prueba científica de la existencia Ovni, muestran la marca de un elevado grado de confusión intelectual.

Porque no hay ni hubo nunca prueba científica de la existencia de un objeto o de un fenómeno que surge de la observación directa anterior a toda teoría explicativa – se trate de un seísmo, un quásar, de un cometa….o de un OVNI!!. Sólo hay pruebas testimoniales.

Y por otra parte la Ciencia no puede hacer otra cosa que utilizar esas pruebas testimoniales para establecer – en un primer estadio – la realidad de los objetos o de los fenómenos que – en segundo estadio – va a esforzarse por explicar construyendo modelos y confrontando éstos con los datos de la observación aportados por los testimonios de los observadores.

Los argumentos señalados por los que no creen en los OVNIS son RACIONALIZACIONES DE UNA CREENCIA y no se sostienen frente a un análisis avanzado de las fuentes y de los métodos del conocimiento.

Se podría creer entonces que los señores RACIONALISTAS DOGMÁTICOS esperan algunas buenas observaciones aisladas, ricas en detalles y perfectamente registradas para cambiar su parecer sobre los OVNI.

Desengañémonos: cuando se les aportan tales observaciones las atribuyen tanto a un fenómeno natural como a una mistificación. Dejemos pues a los RACIONALISTAS DOGMATICOS con su neurosis…” (FIN DE LA CITA)

EPILOGO

Haciendo caso a lo señalado por el astrofísico Guerín, y sin intentar convencer a quien no analiza racionalmente los hechos, señalamos todas estas cosas para aquellos que desconocían algunos de estos pormenores.

Nadie pretende cambiar a un obtuso (o neurótico, a decir de Pierre Guerín).

El punto es que quien promueve datos erróneos de la Ufología está desinformando a la población y a los medios de prensa, sobre esta delicada cuestión.

Aprovechándose de una alicaída Ufología (con sus devaneos diletantes), el desinformador oficial intenta hacer prensa con su “laboratorio fotográfico en caída libre”.

Bien lo dijo el Astrofísico Claude Poher:

“Para juzgar al Fenómeno Ovni se debe ser intelectualmente honesto y estar bien informado”.

Justamente, dos cualidades que el desinformador oficial de Argentina, no posee ni por asomo.

Un manto de piedad para su inútil tarea.

C.Ferguson