¿PORQUÉ DIFUNDIMOS? (Por Carlos Ferguson)
EDITORIAL (POr Carlos Ferguson)
Nos acercamos al décimo aniversario de fundación de la RAO y es realmente grato saber que nuestra organización se afianza día a día a pesar de todos los obstáculos desde 1991 a la fecha.
El próximo 24 de junio servirá también de pretexto para efectuar una jornada conjunta de DIFUSIÓN de lo que somos y a qué apuntamos. Dicha jornada será crucial para darnos a conocer, y también para ver el grado de participación de cada miembro.
Pero… ¿para qué difundimos… y para quien?
Para todo investigador Ovni la fuente o materia prima son principalmente las personas, quienes nos trasmiten sus experiencias. Sin personas no hay casos. Por ende, la única forma de obtener esos datos es tomando contacto con la opinión pública. Pero esta función no debe partir solamente de nosotros hacia el público (lo que nos limita en extremo), sino que debemos darnos a conocer masivamente a la gente. Como entidad (independientemente de la difusión personal o grupal).
Es decir: debemos adicionar a nuestra actividad un esfuerzo mínimo adicional para la red.
El gran conjunto de la población tiene hoy por hoy, múltiples alternativas para satisfacer su inquietud con el tema, o para notificar un suceso. Pero si coincidimos en que muchos de los participantes del tema ovni tienen tendencias totalmente dispares, no cabe duda que nuestra tarea será posibilitar que un gran caudal de personas sepan que pueden contar con un órgano (la Rao – sus miembros) para denunciar cualquier hecho.
Con esta tarea recuperamos una información que quizás se hubiese perdido irremediablemente.
Es importante contar con instrumental y salir al campo en busca de evidencias… pero lo es de igual manera, el poder captar denuncias a través de la gente.
Pero también, esa difusión no sólo tiene el objeto de captar posibles denunciantes, sino mostrar el perfil encarado.
Y es importante porque mucha gente cree que TODOS LOS PARTICIPANTES DEL TEMA OVNI PIENSAN Y OBRAN IGUAL. No hacen distinción entre algunos farsantes, delirantes o investigadores serios. Y aún más… estiman que el ser «famoso» (que en Argentina se entiende como aparecer en la TV»), implica lo mismo que «saber» o «estar más informado».
Por eso es tán necesario el esfuerzo conjunto para el próximo 24 de junio.
Pero a esto se sumará otro hecho importantísimo: el 5to Encuentro de la Rao en Mar del Plata (sábado 18 y domingo 19 de agosto). Allí realizaremos varias actividades, como talleres científicos (que han demostrado ser tan útiles para todos los investigadores), así como las ponencias en sí y la concreción de la 1er EXPOSICIÓN NACIONAL SOBRE EL TEMA OVNI (Expovni – Ovnifest 2001). Esta será la primera vez en nuestro país donde existirá una exposición de material sobre el tema pero realizado por decenas de investigadores. La función más importante de este evento será el darnos a conocer a la gente y a los medios, de una manera distinta a la de las conferencias o ponencias de congreso.
La Rao festeja estos 10 años de vida, continuando en la realización de eventos distintos y pioneros.
Y volviendo a este número 39 del boletín, entre las muchas notas de interés enviadas por miembros investigadores y colaboradores, conmemoramos en el recuerdo a un estudioso como el Dr. James Mac Donald.
Este hombre de ciencia fue quizás el más crítico de los ufólogos americanos con respecto al Libro Azul y Condon. Su accionar fue un «hierro candente» para las autoridades y para negadores a ultranza, como Philip Klass y D. Menzel.
Evidentemente era dueño de un temperamento muy particular y fue un gran difusor del tema en distintos escenarios donde le tocó disertar. Frecuentemente escuchamos en boca de algunos vivillos, que Mac Donald profesaba la creencia «extraterrestre» del fenómeno Ovni. Pero él mismo se encargó de aclararlo en reportajes…»NO CREO CON PROFESIÓN DE FÉ QUE SON EXTRATERRESTRES…CREO QUE ACTUALMENTE, Y DE ACUERDO A LO ESTUDIADO, ES LA EXPLICACIÓN MÁS ADECUADA». Pero más allá de esto, queda la importante obra de Mac Donald.
Mac Donald no era un pesimista como algunos sugieren. Si bien coincidía en que el informe Condon había desprestigiado al tema, resaltaba su fe en los nuevos hombres de ciencia…los jóvenes.
Quizás, alguna decepción personal tenía su fundamento en que Mac Donald se había adelantado mucho al tiempo. Su perspectiva y visión aguda de lo que había acontecido en el Proyecto Condon y con la temática en general, habrán sido un duro golpe para él, sumado a su intimidad personal.
Hace 30 años el Dr. Mac Donald se quitaba la vida. Muchos de los que alientan hipótesis conspirativas, creen que Mac Donald fue silenciado debido a su urticante accionar. En EE.UU se sostiene mayormente que problemas personales fueron los causantes de la triste decisión.
Sea como fuere… hace 30 años la Ovnilogía perdía a un hombre realmente notable, de gran prestigio.
Quizás, en aquella difícil encrucijada del 13 de junio de 1971, cuando estaba por dejar este mundo, Mac Donald haya pensado en una tarea fatua, en una lucha personal inútil.
Pero quizás él no sabía que ya era parte de la historia del fenómeno Ovni.
Por cierto, nos ha dejado un gran vacío, al igual que otros prestigiosos investigadores. Pero queda la esperanza de poder cumplir con aquel sueño…»los jóvenes científicos». La continuidad de su obra.
Nuestro recuerdo en este nuevo milenio, para quien ya tiene un lugar destacado en la Ufología Mundial…y quizás también en el futuro, cuando sea reconocido como un auténtico pionero que no titubeó en enfrentarse al ridículo, a sus propios colegas y a preconceptos varios, en aras de su propio convencimiento.
Carlos D. Ferguson